Después de una intensa precampaña de 60 días, Claudia Sheinbaum cerró su periodo de precandidatura a la presidencia de la República en el Monumento a la Revolución, ubicado en la Ciudad de México. Durante el evento, agradeció la participación activa de militantes y simpatizantes que se dieron cita.
Entre los invitados especiales destacaron las figuras de los cinco precandidatos que aspiraban a la candidatura, conocidos como las “corcholatas”: Marcelo Ebrard, Adán Augusto, Gerardo Fernández Noroña, Manuel Velasco y Ricardo Monreal.
En su discurso, Sheinbaum celebró la victoria en la precampaña, destacando que la diferencia entre ella y la segunda contendiente, Xóchitl Gálvez, fue de 20 puntos porcentuales. Hizo énfasis en los logros de los programas impulsados por el Gobierno federal, como la Pensión para Adultos Mayores, el Tren Maya, el Tren Interoceánico, la nacionalización de Litio, el aumento salarial duplicado, entre otros, asegurando que se llevaron a cabo sin aumentar la deuda del país y como resultado de la lucha contra la corrupción.
La exmandataria capitalina afirmó que, en caso de ganar la Presidencia, mantendrá la austeridad en el gobierno, eliminando el Estado Mayor Presidencial, sin retorno de pensiones para expresidentes, evitando gasolinazos, aumentos en las tarifas de luz y sin condonación de impuestos a grandes contribuyentes.
Para concluir, la precandidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia convocó a los ciudadanos a materializar el sueño de tener a la primera mujer presidenta de México, expresándose como una líder lista para caminar al lado del pueblo mexicano.