Luis Cárdenas Palomino, excoordinador de inteligencia de la Policía Federal, quedó libre de la acusación de tráfico de armas por el operativo “Rápido y Furioso”, luego del fallo de una juez federal en Sonora, quien ordenó su liberación; sin embargo, no saldrá de prisión porque aún hay un proceso penal en su contra.
La titular del Juzgado Noveno de Distrito en Sonora, con sede en Agua Prieta, Karina Almada Rábago, determinó que la Fiscalía General de la República (FGR) no ofreció pruebas suficientes, ni evidencia alguna que confirmara la participación del excolaborador de Genaro García Luna, en el sexenio de Felipe Calderón.
Durante el proceso judicial en contra de Cárdenas Palomino, la FGR presentó documentos, videos y testimonios de funcionarios del gobierno de Estados Unidos para argumentar la acusación por omisiones en el ingreso de armas.
Pero, de todas estas pruebas, de acuerdo con la juez, en ninguna se señala directamente al ex funcionario calderonista de estar enterado del operativo.
Ante esto, la juez ordenó liberar al excolaborador de García Luna por falta de elementos para procesarlo. Sin embargo, el exmando de seguridad seguirá preso en el penal de máxima seguridad del Altiplano, por el caso de tortura a cuatro supuestos integrantes de la banda Los Zodiaco.
Los Zodiaco era la banda a la que —supuestamente— también pertenecía Israel Vallarta Cisneros, ex pareja de la francesa acusada de secuestro por el gobierno de Felipe Calderón, Florence Cassez. Dos de las supuestas víctimas de Cárdenas Palomino son familiares de Vallarta.
El operativo “Rápido y Furioso” consistió en que el gobierno de México diera acceso a la Agencia de Alcohol, Tabaco y Armas de Estados Unidos (ATF) para vigilar el ingreso ilegal de más de 2 mil armas al país entre 2007 y 2011, para geolocalizar e identificar a los compradores de armas para los cárteles de la droga.
Pero “Rápido y Furioso” falló. Las autoridades perdieron el rastro de las armas y varias de ellas fueron aseguradas en operativos entre 2013 y 2021.